Momentos robados sin quererlo,
vivencias no vividas,
pasos perdidos,
palabras inocentes y primerizas.
La mañana me sorprende
en un nuevo pueblo,
al despertar recuerdo
tu fuerte abrazo
y mi corazón me dice
que lo reviviremos luego.
Los días pasan
y oigo tu voz de lejos,
que frio es el teléfono
cuando no te tengo.
Ansio mi regreso
para tenerte de nuevo,
jugar en el suelo
y disfrutar todos los momentos,
como te extraño mi pequeño hijo.
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